La práctica de la arqueología en la llamada alta Amazonia ha conocido progresos significativos en el transcurso de los últimos 10 años. Los resultados de los diversos programas de investigación está cambiando el panorama cultural del medio tropical en América del Sur y por ello merecen un tratamiento teórico y metodológico coordinado. Un primer paso es efectuar un estado de la cuestión a nivel regional que permita comparar la evolución social a través del tiempo en este amplio espacio dotado de medios análogos o divergentes. La investigación está demostrando que la Amazonía vio el surgimiento temprano de sociedades complejas que contribuyeron activamente a la génesis y desarrollo de la civilización andina. Hoy resulta evidente que las antiguas sociedades de la Amazonía occidental tuvieron interacciones continuas con las sociedades andinas y es probable que el fruto de estas interacciones se vea reflejado en el carácter de estas formaciones sociales. En este orden de ideas conviene preguntarse sobre las modalidades regionales que tomaron los cacicazgos amazónicos a través del tiempo. Otro tema recurrente en los últimos años se relaciona con las distintas hipótesis de grandes movimientos de poblaciones amazónicas, acaecidas en torno al primer milenio antes del presente y de cómo estos afectaron a las sociedades que estaban ya establecidas en la alta amazonía desde hace varios milenios.
Una temática que no ha sido tratada por los arqueólogos es la discusión de las políticas que deberían ser ejercitadas por los investigadores que trabajan en los territorios donde viven actualmente los pueblos indígenas de la Amazonía occidental. Muchos de estos pueblos tienen modos de vida tradicionales y, por la presencia de los investigadores, se ven progresivamente invadidos por los efectos de la globalización. Por otro lado, los pueblos son conscientes que el interés que muestran los investigadores en la historia antigua de sus pueblos y territorios es una oportunidad de alcanzar privilegios o por lo menos de atraer la atención de las autoridades (locales y centrales) para resolver sus necesidades materiales. Los arqueólogos se convierten así en intermediarios entre los poderes gubernamentales y las comunidades locales. Desde el punto de vista epistemológico, el arqueólogo está confrontado a una posible continuidad histórica entre las formaciones sociales antiguas y las actuales, por ello la mirada científica deja de ser neutra para convertirse en un mecanismo de cambio y adaptación social.
Dentro de esta óptica, hoy más que nunca se hace imprescindible iniciar una discusión seria y realista de lo que deben ser la políticas de investigación en el campo de la arqueología en el Ecuador en general. El conocimiento, la preservación y la difusión de los recursos patrimoniales ancestrales debe ser una política de estado ligada estrechamente con la realidad de los diversos pueblos que habitan el territorio nacional. Las leyes y los reglamentos que incumben al manejo y a la conservación del patrimonio (material e inmaterial) necesitan integrar un enfoque coherente con la diversidad pluricultural que conforma la nación ecuatoriana. La comprensión y el manejo de esta problemática deben caracterizarse por el respeto a las culturas ancestrales y contemporáneas que conforman la sociedad ecuatoriana, pero al mismo tiempo deben ser tratados de manera consciente de la responsabilidad histórica y científica que estos recursos tienen en el marco del patrimonio tangible e intangible universal de la humanidad.
La investigación arqueológica debe trascender a la mera aplicación de métodos y técnicas doctas para abordar el manejo del patrimonio ancestral de una manera participativa en que las comunidades (directamente herederas o no de ese patrimonio) se integren y asuman las responsabilidades y los privilegios que el manejo de los recursos arqueológicos implican. La experiencia participativa, las temáticas y las discusiones que confrontan cotidianamente los etnólogos son un componente integral de la practica arqueológica moderna. Por ello, la disciplina tiene forzosamente una responsabilidad social que no puede ser ignorada por la arqueología contractual que se práctica regularmente en la Amazonia.
La reunión internacional que tendrá lugar en Quito, entre el 8 y el 10 de agosto 2011 se propone discutir estas temáticas a la luz de los avances que ha hecho la arqueología a nivel regional en la Alta Amazonía y de configurar una síntesis de la temáticas que deberían ser abordadas de manera prioritaria para comprender y estudiar mejor los procesos culturales que desarrollaron los pueblos amazónicos a través del tiempo. Una parte fundamental de la reunión será el conversatorio sobre las políticas que deberían ser implementadas en la investigación científica, en una zona donde el patrimonio natural y cultural está en riesgo permanente. Este dialogo se efectuará entre antropólogos, arqueólogos, funcionarios de instituciones culturales y miembros de la comunidad en general. Este conversatorio tendrá lugar el ultimo día del coloquio y tendrá la dinámica de un taller de discusión abierta entre todos los concurrentes.
El programa del evento está estructurado en torno a tres ejes :
- Temáticas actuales de la investigación arqueológica en la Alta Amazonia
- Resultados de las investigaciones recientes y el panorama que estos abren para futuro de la investigación
- Políticas que deben encausar la investigación científica arqueológica en la Alta Amazonia.
El evento está auspiciado por el Ministerio Coordinador de Patrimonio Natural y Cultural, el Ministerio de Cultura del Ecuador, el Instituto de Investigaciones para el Desarrollo (I.R.D.), el Instituto Francés de Estudios Andinos (IFEA), la Oficina Regional de Cooperación de Francia en los países andinos y la Embajada de Francia en el Ecuador.
El coloquio se efectuará en el auditorio del Museo Nacional (Patria y Leonidas Plaza) en la ciudad de Quito.
Más detalles…
Informaciones generales sobre el Coloquio [PDF]
Programa tentativo del evento [PDF]